¿Quépasa si se corre en mi boca?¡Me ahogaré, o devuelvo! Me apuesto algo a que sabe terrible. Oh, no, no puedo tragarme eso. Mas tampoco lo puedo escupir sobreél. Olvídalo, no deseo ni meditar en ello jamás más.
Muy frecuentemente se ha hablado de los puntos de contacto entre el Bondage y la práctica del Kinbaku. Existiendo, sin duda, puntos de contacto entre estas 2 formas de atadura erótica, no hay que meditar, en caso alguno, que se trata del mismo tipo de práctica.
Usted no ofrece consejos sobre sus estados sensibles. Lo masculino siempre y en toda circunstancia desea arreglar las cosas como una conclusión para que la próxima labor pueda iniciarse y terminarse. Las mujeres no trabajan de esta forma. Nada termina, simplemente se siente hasta que otro estado sensible toma el control.
El que su pareja tenga buenos o malos recuerdos de su pasado con otras ex parejas no impide que una nueva relación no sea triunfante, en consecuencia la sombra de ese pasado no tiene por el hecho de que perseguir la nueva relación.
Solo debemos aprender a escucharnos a nosotros mismos. Eso te dará la libertad que tanto precisas, que tanto ansías y que te llenará de esperanzas, de amor y de felicidad. Nada es más valioso que tu libertad para poder conseguir aquello que más ansías. Esto nos lleva a la siguiente clave.
Usando sus hombros y pies como palancas, la mujer levanta sus caderas para adoptar una posición de puente. Mientras que levanta sus caderas, el hombre extiende sus brazos para continuar administrando sexo oral. Trate de llenar por lo menos 3 series de diez subidas de puente.
Se afirma que un grano de polvo mide 20 micras (dato dado por técnicos en computación cuando determinan la distancia mínima entre la cabeza lectora de datos y la superficie del diskette). El SIDA mide 31 cienmilésimas de pulgada. 500 espermatozoides caben en una pulgada (media micra aprox.).
Quiere decir que, si estás insistiendo en meditar en esa persona, vas a persistir todo el tiempo en proseguirse pensando en esa persona y cada vez esos caminos neuronales en tu cerebro se harán más fuertes, hasta que llegue un instante en que se conviertan en una obsesión.
Entonces, ¿De qué forma es posible que, si hacen los mismos esfuerzos que todos hacemos (las tensiones ya antes mentadas) como es que han logrado mantener viva la pasión y esta por su parte ha podido seguir medrando?
La tercera vía era llevar las cosas a un plano físico y que, si no funcionaba, siempre y en toda circunstancia podría retomar ciertas alternativas precedentes. Decidí que, si bien esta no fuera la más simple, sí era cuando menos la que más probabilidades de éxito me ofrecía. Con lo que me decanté por pasar a la acción.